Iris Ambuehl recibirá su diploma de la escuela secundaria Pharr-San Juan-Alamo Early College High School en San Juan, Texas, esta primavera, unos seis meses después de haber recibido un título técnico en biología de la South Texas College.

Iris no está haciendo las cosas al revés. En cambio, la joven de 18 años, que quiere ser cirujana, está aprovechando al máximo el (enlace en inglés) de la South Texas College que ofrece clases de nivel universitario a estudiantes de secundaria y les permite obtener créditos para la escuela secundaria y la universidad por esas clases. Además de acercar a los estudiantes a un título universitario o una certificación profesional, estos programas les dan a los chicos una idea de cómo es la universidad y el desafiante trabajo que abarca.

Por qué son importantes los programas de matriculación doble

La tasa de graduación de la escuela secundaria en Estados Unidos ha alcanzado un (enlace en inglés), y la (enlace en inglés). Pero una vez allí, muchos estudiantes descubren que no están preparados para los desafíos del trabajo a nivel universitario. Aproximadamente (enlace en inglés) necesitan tomar cursos remediales, que cubren las habilidades que deberían haber aprendido en la escuela secundaria. Alrededor del (enlace en inglés) nunca se gradúan.

La matriculación doble, también llamada matriculación simultánea y de doble crédito, es una de las formas en que las escuelas secundarias esperan solucionar estos problemas. “Es una autopista a la universidad”, dice Elizabeth Barnett del (enlace en inglés) de la Columbia Teachers College. “Es una forma para que los adolescentes lo prueben mientras… su escuela secundaria los está vigilando”. A medida que los estudiantes abordan estas clases más difíciles, sus maestros y consejeros de la escuela secundaria están ahí para ayudarlos a aprender habilidades de estudio vitales que a menudo no se enseñan explícitamente, pero que son requeridas para el trabajo a nivel universitario, como la administración del tiempo, lecturas más profundas, habilidades de investigación, redacción de ensayos e informes largos y la autoevaluación.

De hecho, algunas escuelas secundarias están completamente organizadas en torno a la idea de la matriculación doble. En estas escuelas secundarias de educación superior temprana (enlace en inglés), los estudiantes generalmente asisten a suficientes clases de nivel universitario durante el tercer y cuarto año de secundaria para graduarse con el equivalente a dos años de crédito universitario. Estas escuelas tienden a ser extremadamente rigurosas y enfocadas. Es posible que los estudiantes que quieran un buen programa de fútbol americano o un programa de teatro musical deban buscar en otro lado, pero las (enlace en inglés), lo que sugiere que la matriculación doble es un modelo excelente para ayudar a los estudiantes de familias de bajos recursos a prepararse y tener éxito en la universidad.

Incluso los resultados de la matriculación doble, por sí solos, son prometedores. Un (enlace en inglés) encontró que los estudiantes que toman clases de matriculación doble tienen más probabilidades de ir a la universidad, estar preparados para realizar trabajos a nivel universitario y obtener un título universitario. En algunos casos, los estudiantes obtienen suficientes créditos mientras están en la escuela secundaria como para reducir la cantidad de tiempo (y dinero) que necesitan invertir en la universidad.

Cómo funciona la matriculación doble

La matriculación doble suele ser una colaboración entre la escuela secundaria del estudiante y una universidad local. La mayoría de las clases de doble crédito se imparten en las escuelas secundarias por el personal de la escuela secundaria. Dado que la universidad está dando crédito por la clase, debe asegurarse de que sea verdaderamente de nivel universitario. Para lograrlo, el personal de la universidad puede proporcionar un esquema del curso, sugerir recursos, observar la clase de la escuela secundaria o reunirse con el maestro de la clase. En algunas escuelas, la necesidad de maestros para clases de matriculación doble lleva a la escuela secundaria a alentar al personal para que regrese a la universidad y obtenga títulos de posgrado.

No todas las clases de doble crédito se llevan a cabo en las escuelas secundarias. Algunos estudiantes se inscriben en clases en línea, mientras que otros van al campus universitario para asistir a clases universitarias regulares o cursos especiales solo para estudiantes de secundaria. Si bien los expertos dicen que las clases de matriculación doble pueden tener éxito en cualquier entorno, muchos creen que las clases en los campus universitarios tienden a ser más rigurosas.

Iris tomó muchas clases de doble crédito en su escuela secundaria, pero cuando se trataba de química orgánica, iba a la universidad para tomar la clase con estudiantes de secundaria de toda su área. “Disfruté de tener esa experiencia independiente de ir a la universidad”, cuenta. “Los profesores nos trataron como si fuéramos estudiantes universitarios. Eso me gustó”.

Stephanie Warner, ahora de 22 años y estudiante de último año en el campus de Tri-Cities de la Washington State University, tomó clases en la Pierce College como parte de su programa de matriculación doble llamado (enlace en inglés). Explica que se perdió de algunos aspectos de su último año ya que estaba tomando clases fuera del campus. A pesar de eso, expresa que las clases universitarias fueron una gran oportunidad. “La variedad de conversaciones y perspectivas en clase fueron más profundas” que en sus cursos regulares “porque había más diversidad, ya sea de raza, edad o experiencia”, escribió en un correo electrónico.

Equidad

Los programas de matriculación doble han crecido drásticamente para incluir a estudiantes con diferentes habilidades académicas y estudiantes que están más interesados en obtener una certificación profesional, en lugar de una licenciatura. Pero no todo el mundo tiene acceso a la matriculación doble. Los investigadores han (enlace en inglés).

¿Por qué? Muchos estudiantes nunca se enteran de la matriculación doble, no pueden pagar las tarifas que cobran algunos programas o no pueden viajar al campus universitario donde se imparten las clases. Es posible que otros no hayan tomado una clase de requisito previo o que ni siquiera sabían que había que tomarla. Y muchas escuelas, particularmente en áreas rurales, no tienen suficientes estudiantes interesados o maestros calificados para ofrecer clases de matriculación doble en el campus.

Las escuelas de educación superior temprana a menudo están diseñadas (enlace en inglés). En la escuela secundaria Brownsville Early College High School (video en inglés) en Brownsville, Texas, casi todos los estudiantes son hispanos y de familias de bajos recursos. La escuela secundaria de educación superior temprana de Iris en San Juan, Texas, tiene una demografía similar, y ambas escuelas tienen tasas impresionantes de éxito universitario, con graduados que superan los promedios estatales en términos de graduación de la escuela secundaria, obtención de títulos universitarios y no necesitar clases remediales en la universidad.

Limitaciones

Aunque los estudiantes que están en programas de matriculación doble obtienen créditos universitarios, es posible que esos créditos no puedan transferirse a la universidad de cuatro años de su elección. La mayoría de las universidades públicas estatales aceptan créditos de los programas de matriculación doble de su estado, pero es posible que los créditos no cumplan con los requisitos de educación general o especialización. Es posible que algunas universidades privadas y otras públicas fuera del estado no reconozcan los créditos obtenidos en las clases de matriculación doble. Iris, quien asistirá a la Johns Hopkins University (JHU), dice que, si bien la JHU no le dará crédito por las clases de matriculación doble o un título técnico, no se arrepiente de haber tomado las clases.

Algunas universidades que no aceptan créditos de matriculación doble aceptan créditos por clases de colocación avanzada o AP. Las clases AP son clases avanzadas en 38 materias que se ofrecen en la mayoría de las escuelas secundarias de todo el país. Estas clases permiten que los estudiantes tomen el curso en su escuela secundaria, el cual es impartido por un maestro de la escuela secundaria, así tienen la oportunidad de obtener créditos tanto para la escuela secundaria como para la universidad. Las clases AP tienen un examen final que puede ser estresante porque es riguroso, y los estudiantes deben obtener un 4 o un 5 (de 5) en el examen AP para obtener créditos universitarios. Cuando los chicos toman clases de matriculación doble, automáticamente obtienen el crédito universitario. Sin embargo, algunas universidades no aceptan créditos de matriculación doble. Entonces, dependiendo de a cuál universidad quieran ir los estudiantes, los cursos y exámenes AP pueden ser una mejor opción. Para los chicos que planean asistir a una universidad pública en el estado, las clases de matriculación doble probablemente sean una mejor opción. Para los chicos que planean asistir a una universidad de élite, privada o fuera del estado, las clases AP probablemente sean una mejor opción.

Los padres también deben fijarse si su hijo está listo para el desafío de las clases universitarias y tiene tiempo para hacer el trabajo. Es valioso que los estudiantes se desafíen a sí mismos, pero poner demasiada presión y sin pausa en los estudiantes puede ser contraproducente. Entonces, si bien un estudiante de noveno grado puede ser elegible para clases de matriculación doble, es mejor que los estudiantes, padres, consejeros y maestros ayuden a los estudiantes a mantener su propio ritmo.

Un programa exitoso de matriculación doble debería tener:

  • Un programa establecido: ¿Existe un programa formal y organizado, o simplemente un grupo aleatorio de clases? Busca un sitio web sobre matriculación doble, una página en el sitio web de la universidad que explique el programa de matriculación doble o personal de la universidad dedicado al programa de matriculación doble.
  • Una universidad que participa activamente: este es el mejor indicador de que los cursos son verdaderamente clases universitarias. La participación puede verse de muchas formas, pero que haya reuniones regulares entre los profesores de la universidad y los maestros de la escuela secundaria, así como visitas a los salones de clases son buenas señales. Los programas certificados por la (enlace en inglés) cumplen con altos estándares, pero muchos programas buenos no tienen ese sello de aprobación.
  • Maestros calificados: muchos excelentes maestros de secundaria no tienen la experiencia en la materia para impartir una clase de nivel universitario. Pregunta si el maestro se ha capacitado lo suficiente para impartir el curso o si tiene otra experiencia en el campo.
  • Ayuda para los estudiantes: si el programa de matriculación doble va a ser una verdadera ruta a la universidad, es posible que algunos estudiantes necesiten ayuda. Averigua qué tipos de apoyo (como asesoramiento o tutoría) están disponibles.
  • Un buen historial: pregunta sobre la reputación del programa de matriculación doble y revisa los comentarios de la escuela en línea para ver si los estudiantes han mencionado el programa.

Puntos clave

  • Pregunta sobre la matriculación doble al elegir una escuela secundaria para tu hijo. Descubre cómo funciona y qué requisitos (si los hay) o clases de requisito previo debe tomar tu hijo para participar.
  • Conoce las metas y prioridades de tu hijo para decidir si la matriculación doble es una buena opción (o si es más probable que los cursos y exámenes AP cumplan con las metas de créditos universitarios de tu hijo).
  • Averigua si las universidades u otros programas posteriores a la escuela secundaria (a los que tu hijo probablemente asistirá) aceptan créditos de matriculación doble.

Este artículo es parte de nuestra serie de artículos Transformando la escuela secundaria, una colección de historias, videos y podcasts que exploran las prácticas que preparan a los estudiantes para alcanzar el éxito en la universidad y más allá.

Translated by: SpanishWithStyle.com